Vida Dura (2)

Eu sei que tinha prometido dar-vos notícias sobre as nossas andanças alentejanas, mas não tenho tido tempo para bloguices.

O tema era interessante por se tratar da pintura feita nas paredes das igrejas e capelas alentejanas. Nem sequer imaginava que houvesse tanta coisa e tão mal conservada!

Os conferencistas - português e espanhol - foram óptimos.

A única nódoa foi o guia. Típico portuguesito, convencidito, ignorantezito que, não sabendo quase nada, dizia os maiores disparates com ar de perito na matéria.






















Interessante foi saber que São Cucufate, quase desconhecido entre nós, é o santo das coisas perdidas entre os espanhóis.

Aqui fica, em espanhol - os pais que traduzam aos eventuais filhos curiosos -, o cerimonial a seguir quando perderem qualquer coisa:

San Cucufato los cojones te ato...

Dicen que no hay más saber que la sabiduría popular. De hecho, desde niño escuché aquel fácil sortilegio por el que las cosas perdidas aparecían. El salterio es bien sencillo:

"San Cucufato, San Cucufato, los cojones yo te los ato, si me aparece X (cosa perdida), yo te los desato".

Se recita esto mientras hacemos un nudo en un pañuelo y lo dejamos en un sitio olvidado. Dicen que al poco la cosa aparece. Es entonces cuando el devoto, fiel a la palabra dada al santo, debe desatar el nudo que simboliza los cojones atados de San Cucufato.

Pues bien, ya lo sabéis, cuando se os pierda algo: los cojones de San Cucufato. ¡Qué no se olvide desatarlo! Y de dar descanso al escroto del buen hombre.